Nuestra "casa grande"

Lugo (Lucus Augusti), capital del Antiguo Reino de Galicia y también la más antigua, con más de 2000 años de historia fué fundada por Paulo Fabio Máximo en nombre del Emperador Augusto (ambos aquí representados), se puede considerar una ciudad limpia,

entrañable, con lugares tan acogedores como esta "Praza do Campo" que nos llevará a "rincones" que testifiquen que lo del slogan "¡Y, para comer Lugo!" es una realidad,

real también es el ir y venir de los encargados de la limpieza que testifican con su buen hacer lo que considero al principio, que Lugo es una ciudad limpia,

igual testimonio es el paso frecuente por las aceras de este "coche" que las va limpiando y lavando,


no obstante, a veces los restos de los cigarros siguen una dirección equivocada,

no así los jardineros, aquí se destaca poco su presencia física (no quise acercarme no se fuera a molestar), pero si podemos apreciar los resultados de su trabajo

Época de tulipanes, crecen en medio de pensamientos más madrugadores, pero que aún duran, y detalle de un cerezo japonés en flor que podemos encontrar en este parque y en muchos sitios de la ciudad,

también repartidas por toda ella, nos encontramos con macetas, aquí un jardinero las riega de forma mecánica y, ¡como no, las cuida!

así podemos disfrutar de imágenes como las que traigo de camelias y pensamientos recién regados,

pero, siempre hay un pero y lo malo es cuando la "basura" se cansa y decide tomar "un real de asiento"

o mucho peor si ocupa cualquier espacio que no sea el que le corresponde: "las papeleras", "los contenedores" y ¿por qué no? si es preciso "el bolsillo".

Esta imagen es lamentable y no por eso menos real.

¡Qué agradable es pasear por una ciudad limpia!, pienso que no es tan difícil conseguirlo, sólo es cuestión de proponérselo.

Cuidemos la ciudad y consigamos una ciudad limpia, agradable, acogedora... al fin y al cabo es nuestra "casa grande".

Abrazos.