20 de Mayo del 2011
Este día hace un año, iba a ser un día bonito, un día feliz,
empezó por La Muralla desmenuzando con su autor y tres grupos de club de lectura, el libro de turno,
fue hermosa e interesante la introducción, a partir de aquí
mi vida se truncó hasta convertirse en auténtica pesadilla,
una tabla se rompe y me deja atrapada, se necesita romper otra para darme esa falsa libertad que nunca más llegaré a tener, desde este momento el montón de cosas que yo hacía iban a ser recuerdo,
como los "obradoiros" a los que asistía, diversas actividades que me impedían la asistencia al no poder estar ni de pie ni sentada,
la dificultad de movimientos impediría que, cosas tan sencillas como el aseo personal, quedaran limitadas
u otras que por ser anuales, el caso de la jornada de pintura al aire libre, me fueran negadas,
las salidas al campo o simplemente un paseo por los jardines de la ciudad, se vieron truncadas por las lesiones y porque durante bastante tiempo tuve necesidad de usar una muleta, hasta aquí algunas de mis limitaciones que con las que podamos imaginar forman ese equipaje que arrastro desde el 20 de Mayo de 2011,
total que la esperanza de recuperación se me esfumó, al quedar suprimida por la realidad y secuelas del accidente,
un fatídico día y una tabla en mal estado me la jugó
y al día de hoy me siento tan mustia y apagada como las margaritas de la imagen que después de tener una bonita vida sólo queda su decadencia...
Abrazos.